Una se formó pensando en lo que le
gustaría ser, es decir, historiadora del arte. Orientándome laboralmente hacia
lo que demandaba el mercado y descubriendo nuevos horizontes que ni me
había planteado pero que me apasionan, como el periodismo y
la edición en general.
Este es mi caso, pero acomodada
en el mundo editorial ahora descubro mi adicción DOCENTE. Una vez superado el
supuesto pánico escénico que me hizo descartar, desde un primer momento, el
dedicarme a la docencia, mi pasión por la formación, presencial o a distancia,
el diseño de las programaciones o las tutorízación me tienen fascinada.
Respecto a mis áreas de interés,
tengo la gran suerte de que profesional y personalmente coinciden, aunque soy
muy ecléctica:
ARTE (en mayúsculas), con especial sensibilidad hacia el PATRIMONIO HISTÓRICO pero sin descuidar las nuevas manifestaciones
artísticas.
Museología y Archivística también ocupan su
espacio.
Edición y Comunicación como desarrollo
profesional.
Mis expectativas en el curso ENTORNOS PERSONALES DE APRENDIZAJE PARA EL DESARROLLO PROFESIONAL DOCENTE (origen de este espacio) coinciden en su planteamiento:
EXPERIMENTAR.
PERFILANDO